la huella

siguiendo la huella en desorientados pasos,
los vagabundos del amor persiguen pedazos
                                               de su alma.
Siguiendo la huella. -¡Estamos perdidos! (gritó),
un estruendo dejó rechinante los tímpanos;
lo indecible fue mostrado;           
la huella no desaparece, aunque camino al costado,
la huella no la borra el viento, la arena la ha ocultado,
la huella no desaparece, se ha transformado
                            en fragmentos
                                      tibios
                            del hombre.
Vuelven a unirse
en otro texto
recreado.

09/09/2009

eNeCe

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