siguiendo la huella en desorientados pasos, los vagabundos del amor persiguen pedazos de su alma. Siguiendo la huella. -¡Estamos perdidos! (gritó), un estruendo dejó rechinante los tímpanos; lo indecible fue mostrado; la huella no desaparece, aunque camino al costado, la huella no la borra el viento, la arena la ha ocultado, la huella no desaparece, se ha transformado en fragmentos ...